La práctica artística de Eirik Audunson Skaar se basa en un método comunitario que combina la concienciación sobre la contaminación por plásticos con la creación artística. El eje central de su trabajo es la participación activa y la implicación colectiva. Alumnos de escuelas cercanas al lugar donde se desarrolla cada proyecto participan en la limpieza de playas, en la identificación de los plásticos según su uso y origen, y finalmente en el reciclaje de estos materiales para transformarlos en relieves o esculturas al aire libre. Este proceso no solo fomenta el conocimiento sobre la salud de los océanos, sino que también deja un testimonio de arte ambiental en el espacio público.